Dimensiones subjetivas de la pobreza. Retos para la medición



La pandemia COVID-19 exacerbó distintas condiciones sociales que desde hace décadas mostraban brechas de desigualdad, llevando a replantear conceptos como la pobreza, bienestar y marginación, así como las categorías que las integran. En ese sentido, en los primeros meses de 2022 publicamos el artículo “Beyond multidimensional poverty. Challenges of measurement and its link with social policy in Mexico”. El documento hace una propuesta sobre distintas dimensiones que deben considerarse al medir la pobreza, porque las necesidades de las personas abarcan aspectos que van más allá de los ingresos. En los siguientes párrafos profundizaré al respecto.

Es importante señalar que distintos países utilizan medidas multidimensionales para medir la pobreza, en Latinoamérica, por ejemplo, Colombia, Ecuador, México y Chile. En estos países, la medición oficial de la pobreza tiene dimensiones comunes, como la educación, salud, alimentación, ingreso o gasto, servicios en el hogar, entre otras. Por otra parte, existen pocas mediciones oficiales que integren privaciones subjetivas, por ejemplo, Armenia incluyó la satisfacción con ciertos servicios básicos, al igual que Chile y República Dominicana, quienes incluyeron la percepción de discriminación (Santos, 2019).

Al respecto, algunas investigaciones (Martínez-Martínez et al., 2022; Weziak-Bialowolska y Dijkstra, 2014) han mostrado la importancia de incluir categorías subjetivas en la medición de la pobreza, las cuales abarcan aspectos personales, familiares y comunitarios, a nivel micro, meso y macro social. Medir la pobreza lleva a integrar no solo el ingreso, sino incluir varias carencias sociales objetivas y subjetivas, sin embargo, existen vacíos en la literatura sobre su combinación.

A partir de los resultados, algunas de las categorías que proponemos incluir en la medición de la pobreza, son: el entorno construido (falta de banquetas, ausencia de árboles o áreas verdes, falta de cruces peatonales o semáforos, ausencia de iluminación pública) y el transporte público. Puesto que, el no contar con un ambiente construido adecuado exacerba la desigualdad social. Por ejemplo, en las zonas urbanas de México solo el 43% de las calles están pavimentadas, el 33% de las manzanas tienen banquetas, el 22% de los habitantes cuentan con áreas verdes en sus barrios y el 49% de las manzanas cuentan con alumbrado público (INEGI, 2015). Estos porcentajes aumentan en las zonas de vivienda para familias de ingresos bajos y medios-bajos (González-Palomares y Sánchez-Vela, 2014).

La inseguridad pública es otra dimensión importante pues tiene un papel importante en la pobreza (Diprose, 2007). La disminución del crimen permite mejores condiciones de vida, especialmente en áreas inseguras (UNODC, 2005) o donde las personas viven en conflictos armados (Pal, 2001). En el caso de México, se puede explicar por las altas tasas de víctimas del delito a lo largo del tiempo, se estima una tasa de 28,269 víctimas por cada 100,000 habitantes, lo cual genera una pérdida equivalente al 1.54% del PIB por inseguridad y delincuencia en los hogares (ENVIPE, 2019).

La cohesión social es una dimensión relevante, si bien, en México, la Ley General de Desarrollo Social (LGDS) establece que es una de las dimensiones a incluir en la medición oficial de la pobreza. Sin embargo, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL, 2010) señala que este constructo solo puede ser tomado como una característica de una población en su conjunto, porque no se ha podido evidenciar que una sociedad más igualitaria pueda crear condiciones para que se desarrolle la cohesión entre sus miembros; por ello, se había medido de forma separada. Otros estudios sugieren lo contrario (Martínez-Martínez et al., 2021; Schiefer y van der Noll, 2017;), así como la relevancia de incluir la cohesión social en índices sintéticos donde se integren diversas dimensiones, tanto objetivas como subjetivas.

El acceso a la tecnología es otra dimensión importante, porque la tecnología tiene un impacto positivo y significativo en el crecimiento económico de los países, así como un efecto positivo en el PIB per cápita (Farhadi et al., 2012). En la pandemia se puso de manifiesto la desigualdad en el acceso a internet, pues al inicio de la misma, los estudiantes tenían que tomar clases en los teléfonos móviles de sus padres que según la ENDUTIH (2020) es la forma en como la mayoría de los mexicanos acceden a internet, ante la falta de poder hacerlo en el hogar por el costo que esto implica.

Una categoría que no es subjetiva, pero que en nuestro estudio resultó muy relevante fueron las comorbilidades de salud. Lo anterior porque México es uno de los países con mayor prevalencia de obesidad, hipertensión y diabetes, entre otras enfermedades crónico-degenerativas (ENSANUT, 2018). Además, diversos estudios realizados durante la pandemia de COVID-19, muestran que tener comorbilidades es un factor de vulnerabilidad (Clark et al., 2020), al aumentar la gravedad de la enfermedad o la probabilidad de muerte (Coutiño y Martínez-Martínez, 2020), por tanto, el incluirla en la medición de la pobreza es por tanto relevante.

Para concluir, nuestro estudio muestra la relevancia de integrar dimensiones subjetivas, conjuntamente con las objetivas. Esto representa, un reto técnico importante, porque la interacción de ambas podría generar externalidades positivas en la sociedad, al identificar áreas en las que los gobiernos deben intervenir para reducir la pobreza y aumentar el bienestar social. Este es uno de los principales desafíos institucionales y de gobernanza para la implementación y expansión de los programas tanto en México como en América Latina.

Oscar Alfonso Martínez Martínez
Universidad Iberoamericana Ciudad de México


Referencias

Coutino, B., & Martínez-Martínez, O. A. (2020). Comorbilidades en salud y sus efectos en personas con SAR-CoV-2 en México. Panorama Económico, 16(32), 183-198.

CONEVAL. (2010). Metodología para la medición multidimensional de la pobreza en México. CONEVAL, México, DF.

Clark, A., Jit, M., Warren-Gash, C., Guthrie, B., Wang, H. H., Mercer, S. W., ... & Jarvis, C. I. (2020). Global, regional, and national estimates of the population at increased risk of severe COVID-19 due to underlying health conditions in 2020: a modelling study. The Lancet Global Health, 8(8), e1003-e1017.

ENSANUT. (2018). Encuesta Nacional de Salud y Nutrición. Instituto Nacional de Salud Pública

ENVIPE. (2019). Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública. Instituto Nacional de Geografía Estadística e Informática. México

Farhadi, M., Ismail, R., & Fooladi, M. (2012). Information and communication technology use and economic growth. PloS one, 7(11), e48903.

González Palomares, A. L., & Sánchez Vela, C. (2014). Entorno urbano y uso de parques: estudio comparativo entre dos barrios del área metropolitana de Monterrey. Políticas públicas, 2(1), 59-71.

INEGI. (2015). Características de las localidades y del entorno urbano 2014, Instituto Nacional de Geografía Estadística e Informática. México

Martínez‐Martínez, O. A., Rodríguez‐Brito, A., & Ramírez‐López, A. (2021). The Structure of Social Cohesion: An Analysis of Its Levels and Dimensions in Mexico City 1. In Sociological Forum (Vol. 36, No. 1, pp. 159-180).

Martínez-Martínez, O. A., Coutiño, B., & Ramírez-López, A. (2022). Beyond multidimensional poverty: challenges of measurement and its link with social policy in Mexico. International Journal of Sociology and Social Policy.

Pal, M. S. (2001). Perceptions of the poor: poverty consultations in four districts in Sri Lanka. Asian Development Bank

Schiefer, D., & Van der Noll, J. (2017). The essentials of social cohesion: A literature review. Social Indicators Research, 132(2), 579-603.

Santos, M. E. (2019). Challenges in designing national multidimensional poverty measures. Statistics series, No. 100 (LC/TS.2019/5), Economic Commission for Latin America and the Caribbean (ECLAC).

UNODC. (2005). Questionnaire for the Ninth United Nations Survey on Crime Trends and Operations of Criminal Justice Systems, Covering the Period 2003-2004, UNODC, New York.

Weziak-Bialowolska, D., & Dijkstra, L. (2014). Monitoring multidimensional poverty in the regions of the European Union. JRC science and policy reports, EUR, 26627.

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